Dos hombres y una hamaca

Dos hombres y una hamaca

El calor afuera era insoportable. Hacía mes y medio que habíamos entrado de lleno en el otoño y aún no nos había dado tregua el termómetro. En el despacho más que calor, padecía los estragos de un sopor pertinaz del que me arrancó de cuajo y sin preaviso el sonido del...